Tocar un cráneo y no creer que es a quien has amado durante tanto tiempo, ver solo huesos, sin calor, sin carne, no es lo mismo...
El dolor será eterno.
Detenidos desaparecidos, es una mera denominación de una masa muerta por el odio y la codicia del poder. Pero es tan diferente verlo, sentirlo real, con rostros a cada uno de los que murieron por pensar diferente. De ambos lados, de cualquier lado, "el dolor no tiene color político".
Me avergüenza esta parte de mi país, pero es parte de mi historia.
Que descansen en paz, que sus familias tengan paz... algún día.
A base del corto "Fernando ha vuelto".
No hay comentarios:
Publicar un comentario